Celebramos el día de nuestras Santas Bartolomea y Vicenta

Bartolomea Capitanio, fundadora de la Congregación de las Hermanas de la Caridad (conocidas popularmente como Hermanas de la Virgen Niña), siendo muy joven tuvo la inspiración de fundar una Instituto totalmente cimentado en la caridad.

Para poder materializar este sueño, contó con la valiosa colaboración de Vicenta, y juntas lograron establecer los cimientos de este Instituto. En la Carta de Fundación que Bartolomea escribió mientras iba gestando este sueño, proyectó que las personas que formaran parte de esta comunidad debían tener como características principales la caridad, la dulzura y la humildad a imitación del Redentor.

Bartolomea sólo pudo llegar a ver los comienzos del Instituto ya que falleció a los 8 meses de la fundación. Vicenta fue la encargada de continuar con la obra: fue la primera intérprete del carisma de la caridad y lo transmitió con su ejemplo durante toda su vida.

Gracias a este ejemplo de Vicenta, el Instituto que soñó Bartolomea, se multiplicó y extendió no sólo en Italia, donde nacieron las Santas, sino también en Europa, América, Asia y África.

De este sueño nació nuestro colegio, el carisma de la caridad está presente en todos los que formamos parte de él, así como también las características que Bartolomea soñó para toda la comunidad: dulzura y humildad, acompañadas por la alegría que nos genera ser seguidores de Jesús Redentor.

Por esto, para celebrar el día de su canonización, los alumnos de Nivel Primario disfrutaron de un día muy especial: invitaron a sus abuelos a venir al colegio para participar con ellos de un juego sobre la vida de nuestras Santas y hacer una tarjeta. Antes de despedirlos compartieron una merienda.

Los alumnos de 7° grado disfrazados de payasos se encargaron de recibir a los alumnos y a los abuelos en el colegio.

Todos los alumnos hicieron un gesto solidario: por grado, se pidió cacao, galletitas, leches larga vida y aceite que serán donados a los merenderos “Arco Iris de los Chiquis”, “Caritas”, “Piecitos”, “Una Sonrisa” y “Damos”.

También los alumnos de los dos turnos, junto a todo el Nivel Secundario y sala de 5, compartieron una misa en el gimnasio del Ateneo.

En este día tan especial, no faltaron la caridad, la dulzura, la humildad y la alegría; a imitación de nuestras Santas.